Escriure ajuda a ordenar les idees, a reflexionar sobre allò que vols dir i a no deixar-te endur pel soroll ni la immediatesa. De vegades també forma part d’una xarxa, d’una conversa global sense la qual ni s’entén ni té gaire sentit.
La cerca silenciosa del coneixement
[…]cuando Elías, que se encontraba en la gruta del Monte Horeb, fue llamado a la presencia del Señor, un fuerte viento sopló desde las montañas y quebró la roca. Sed non in vento Dominus, dice la Vulgata, pero el Señor no estaba en el viento. Después del viento llegó un tumulto de tierra y aire, mas non in commotione, non in commotione Dominus, el Señor no estaba en ese tumulto....